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Trucos de lenguaje no verbal

Trucos de lenguaje no verbal

Trucos de lenguaje no verbal

En este post vamos a daros unos trucos para que no te delate tu lenguaje no verbal.

Parece que últimamente se habla mucho de lenguaje no verbal, curiosamente. En un montón de blogs y libros se dan consejos sobre él, qué debes hacer, qué no hacer.

También nos informan de lo que quieren decir los gestos, las posturas y los movimientos oculares de los demás. Son habituales frases como: «si se cruza de brazos, indica que está a la defensiva o que siente rechazo».

Hoy yo también os voy a dar unas pistas. Si alguien se rasca la nariz mientras habla es posible que esté mintiendo. O que le pique la nariz. Lo mismo se puede aplicar para rascarse la barbilla. Si alguien se cruza de brazos es posible que se encuentre más cómodo en esa postura. ¿Y si está en su casa tranquilamente viendo la tele cruzada de brazos? ¿Quizá tenga frío?

Lo que os quiero transmitir es que no nos podemos fiar de un solo gesto o postura para sacar conclusiones sobre lo que piensan lo otros. Siempre nos resulta fácil creer en este tipo de trucos para tener algo tan complejo como las relaciones sociales bajo control. Comparable al efecto que producen los horóscopos. Si eres Leo ya se como vas a reaccionar y como te vas a comportar en la mayoría de las ocasiones. Y si no coincide es por el ascendente, ¿verdad?

La realidad es que no podemos sacar conclusiones con tan poca información. Aunque en ocasiones nos gustaría.

Trucos para que no te delate tu lenguaje no verbal

  1. Si quieres aparentar seguridad en una situación lo mejor que puedes hacer es ser consciente de tus puntos fuertes, tus logros  y trabajar tu autoestima.
  2. Si quieres superar el miedo, no basta con el lenguaje no verbal: enfréntate a él.
  3. Si no quieres que se te note cuando mientas, sé sincero, usa la asertividad.
  4. Si no quieres que se percate nadie de que estás juzgando a alguien, empatiza con él, entiende sus circunstancias y si lo ves conveniente, muestra tu desacuerdo.

Además, es muy difícil mentir con el lenguaje no verbal. Cualquier persona que nos esté escuchando con atención notará una desconexión entre lenguaje verbal y no verbal. Fijaos si es difícil engañar con el lenguaje no verbal que hay una profesión que está toda su vida intentando conseguirlo: los actores y actrices. A pesar de ser profesionales y hacer muy bien sus interpretaciones son eso, interpretaciones. Además en ello está el encanto de la actuación, en creernos el papel pero sabiendo que están fingiendo.

En consecuencia, os invito a que trabajéis a fondo el «relleno» del lenguaje no verbal. Superad vuestros miedos, mejorad vuestra autoestima, no juzguéis, poneos en el lugar del otro, sed asertivos, mostrad vuestro desacuerdo con respeto y así no tendréis que fingir una sonrisa porque, sin duda, seréis más felices.

Si quieres EnPositivo podemos ayudarte.

Néstor Villa

El fin del pensamiento involuntario

Si alguien va la médico y dice que oye una voz en su cabeza, lo más seguro es que le remitan al psiquiatra pero lo cierto es que todos oímos una voz o varias voces en la cabeza todo el tiempo. Son los procesos involuntarios del pensamiento que creemos no poder detener.

La voz comenta, especula, juzga, compara, se queja, acepta o rechaza. La voz no es necesariamente relevante para la situación en  la que nos encontramos. Puede que esté revisando hechos del pasado o imaginando situaciones futuras. En este caso casi siempre imagina resultados negativos o problemas; a este proceso se le llama preocuparse.

Incluso cuando la voz es relevante, la interpretaremos en función del pasado. Esto es así porque la voz es el resultado de la experiencia pasada. Así, vemos y juzgamos el presente con los ojos del pasado, con lo cual obtenemos una visión distorsionada. No es raro que la voz sea un torturador, que sea nuestro peor enemigo que nos resta energía vital. Esto causa infelicidad, sufrimiento y enfermedad.

Lo bueno es que podemos librarnos de esa voz. Podéis dar el primer paso ahora mismo. Empieza a oír esa voz tan a menudo como puedas. Presta especial atención a cada patrón de pensamiento repetitivo, esos viejos discos que han sonado en tu cabeza durante años. Eso es lo que se llama «observar al que piensa», que es otra forma de decir: escucha la voz de tu cabeza, estate allí como si fueras un testigo.

Cuando escuches la voz hazlo imparcialmente, no juzgues o condenes lo que oyes porque eso significa que la voz ha entrado por la puerta trasera. Pronto te darás cuenta de esto: está la voz y estoy yo escuchándola, observándola.

Así pues, mientras escuchas un pensamiento, eres consciente no sólo del pensamiento, sino ti mismo como testigo de él. Aparece aquí una nueva dimensión de la conciencia. Mientras oyes el pensamiento, sientes una presencia consciente más allá o debajo del pensamiento. El pensamiento pierde entonces su poder sobre ti y rápidamente te calmas porque no le das energía por medio de identificarte con él.

Este es el comienzo de fin del pensamiento involuntario y compulsivo.

Y si quieres, EnPositivo puede ayudarte

Néstor Villa

Tomado de: «El poder del ahora». Eckhart Tolle.

 

El lenguaje de la felicidad

Todos tenemos una forma específica de hablar, hacemos un uso propio del lenguaje. Por un lado, infinidad de estudios psicológicos y sociales y por otro lado, los estereotipos sociales nos hablan de como en el lenguaje se refleja nuestra formación académica, nuestro estrato social o nuestra profesión.

felicidad enpositivoLo que propongo hoy es justo lo contrario, cómo el lenguaje afecta a nuestra forma de ver el mundo. Es decir, cómo nuestra forma de expresarnos y de nombrar los acontecimientos, las personas y sus actos, crea nuestra realidad.

Si al llegar al trabajo decimos que nos ha costado «un horror» levantarnos de la cama, ¿cómo estamos viviendo el momento de levantarnos? Claramente, lo estamos viviendo como una situación horrible.

Si a continuación comentamos que hemos cogido un atasco «angustioso», igualmente estamos viviendo esa situación de manera angustiosa.

Y si además, resulta que el jefe es «insoportable» ya tenemos un cóctel que no nos hará felices en absoluto.

Si nos fijamos, esta mañana hemos pasado en por algo horrible, algo que nos provoca angustia y estamos con una persona que no podemos soportar. Esta es nuestra realidad en ese momento. Es lo que hemos vivido en cada momento de la mañana y lo que vivimos en el momento en el que se lo contamos a un amigo  o lo recordamos. Y esto es así por la forma en que nos referimos a ello. El lenguaje que hemos  usado para nombrar a cada acontecimiento, ha dado una connotación negativa a todo.

Pero es que es así, me diréis. Es que el levantarse por la mañana es horrible. O al menos yo lo siento así. Es mi forma de ver las cosas. 

En este caso os propongo que penséis qué es lo que hace que sea horrible levantarse, por ejemplo. Puede ser que sea porque me levantado cansado. Porque no he dormido suficiente. Porque no he tenido un sueño reparador. Porque me angustia todo lo que me voy a encontrar a lo largo del día: el atasco angustioso, el jefe insoportable y demás.

Una vez que sepamos qué es lo que hace horrible el levantarse, lo podemos decir de otra forma. En vez de «es un horror levantarse», me he levantado cansado o no he dormido suficiente o no he descansado bien.

Tiene dos ventajas fundamentales esta forma de expresarse. Primero, no estoy viviendo algo «horrible». Segundo, puedo poner remedio a esa situación. Si me levanto cansado porque he dormido poco, lo soluciono fácilmente durmiendo más. Si es por lo que me espera a lo largo del día tendré que idear alguna solución para que esto no siga siendo así.

En resumen, podemos elegir entre vivir un momento horroroso, una situación de la que no podemos escapar o vivir una situación neutra, con una explicación y una solución.

Nos podemos esconder tras defensas de tipo: yo soy así, yo lo veo así, es mi forma de ver el mundo que son excusas para no salir de nuestra zona de confort. Pero realmente es una cuestión de elección.

Tod@s, y digo TOD@S, podemos elegir entre cambiar nuestro lenguaje para vivir una vida más feliz o seguir viviendo situaciones horrorosas, angustiosas e insoportables. Si optas por ser más feliz, el coaching puede ayudarte.

Néstor Villa

¿Invierto en coaching?

¿Cuáles son las ventajas de invertir en un proceso de coaching?, ¿qué resultados puedo obtener?

En lo que respecta al coaching ejecutivo las cifras hablan por sí solas. Tras un proceso de coaching las empresas consiguen un  retorno del 700% de la inversión realizada. Es decir, de cada euro invertido en coaching, se recuperan hasta 700. Otras fuentes hablan de rentabilidades de entre el 570% y el 1000%. En este caso, el estudio es de una consultora de Florida llamada Manchester realizado tras estudiar a 100 ejecutivos que habían recibido coaching.

Lo que es indudable es que se producen mejoras significativas en relaciones profesionales, tanto con superiores o colaboradores. Se mejora el trabajo en equipo, la satisfacción en el trabajo, la productividad, la calidad, la capacidad organizativa, la orientación al cliente y los beneficios. Sin embargo, se reducen la conflictividad y los costes.

Lo que conseguirás con el coaching personal es encontrar y desarrollar todo tu potencial y utilizarlo para los resultados específicos que deseas alcanzar.

En particular, cambiarás antiguos hábitos por estrategias eficaces, mejorarás la calidad de tus relaciones, ganarás tiempo para dedicarlo a lo que de verdad te importa. Incrementarás tu rendimiento en el trabajo y lograrás una vida más equilibrada.

Mejorarás el control del estrés y favorecerás la canalización de las emociones. Reforzarás la motivación y controlarás la actividad mental, controlando los pensamientos negativos. Además mejorarás la capacidad de concentración, de atención, de aprendizaje y de creatividad.

Lo mejor de todo es que estos cambios son permanentes. No hay que ir cada tres meses a “revisión” y se consiguen en un número limitado de sesiones.

Cuando vamos al dentista o a la clínica de estética no nos planteamos si es caro. Pensamos que es una cosa necesaria para nuestra salud o nuestra estética. Sin embargo, cuando nos hablan de nuestra higiene mental o de nuestra felicidad sí nos planteamos que es mucho gasto.

Cuando renovamos los equipos informáticos o el posicionamiento web de nuestra página de la empresa nos parece un gasto aceptable. Pero si hablamos de coaching para mejorar la rentabilidad o la eficacia, siempre encontramos una excusa para no hacerlo.

En vista de estos datos, ¿cuánto estás dispuesto a invertir en un proceso de coaching?

Si quieres, EnPositivo podemos ayudarte.

Néstor Villa

Metamorfosis, crecimiento personal

A menudo, cuando una persona solicita ayuda, tanto en terapia, como en coaching e incluso en orientación laboral, piensan que el profesional que tiene delante, tiene una varita mágica que le va a solucionar todos sus problemas. La realidad es que cada uno de nosotros contamos con las herramientas que mejor se adaptan a nuestras necesidades.

El coach ayudará a que el cliente, es decir a que el coachee descubra cuales son sus fortalezas, le guiará para que él mismo tome sus decisiones, le motivará para que no se rinda, le apoyará en todo momento, pero qué, cómo, dónde, con quién y cuándo, lo decide siempre el coachee.

La siguiente historia refleja la importancia de hacer las cosas por nosotros mismos para tener la libertad de decidir y atribuir que muchas de las mejoras que hemos conseguido han sido gracias a nuestra fuerza de voluntad, constancia y trabajo.

ejemplosUn hombre encontró un capullo de una mariposa y se lo llevó a casa para poder ver a la mariposa cuando saliera del capullo. Un día vio que había un pequeño orificio y entonces se sentó a observar por varias horas, viendo que la mariposa luchaba por abrirlo más grande y poder salir. El hombre vio que la mariposa forcejeaba duramente para poder pasar su cuerpo a través del pequeño agujero, hasta que llegó un momento en el que pareció haber cesado de forcejear, pues aparentemente no progresaba en su intento. Parecía que se había atascado. Entonces el hombre, en su bondad, decidió ayudar a la mariposa y con una pequeña tijera cortó al lado del agujero para hacerlo más grande y ahí fue que por fin la mariposa pudo salir del capullo. Sin embargo, al salir la mariposa tenía un cuerpo muy hinchado y unas alas pequeñas y dobladas.

El hombre continuó observando, pues esperaba que en cualquier instante las alas se desdoblarían y crecerían lo suficiente para soportar al cuerpo, el cual se contraería al reducir lo hinchado que estaba.

Ninguna de las dos situaciones sucedieron y la mariposa solamente podía arrastrase en círculos con su cuerpecito hinchado y sus alas dobladas. Nunca pudo llegar a volar. Lo que el hombre en su bondad y apuro no entendió, fue que la restricción de la apertura del capullo y la lucha requerida por la mariposa, para salir por el diminuto agujero, era la forma en que la naturaleza forzaba fluidos del cuerpo de la mariposa hacia sus alas, para que estuviesen grandes y fuertes y luego pudiese volar. La libertad y el volar solamente podían llegar después de la lucha. Al privar a la mariposa de la lucha, también le fue privada su posibilidad de vuelo.

“Solo la propia y personal experiencia hace al hombre sabio.” Sigmund Freud

¿Recuerdas la última vez que tuviste una metamorfosis hacia el crecimiento personal?  Si quieres, nosotr@s podemos ayudarte.

Sonia Treviño